Refinanciar (quizás) no es la solución.

Refinanciar (quizás) no es la solución.

Refinanciar (quizás) no es la solución.

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Cuando los zapatos nos hacen daño no vamos al médico. Más bien al zapatero. En cambio a menudo cuando nuestra empresa no genera suficiente efectivo para hacer frente a los vencimientos de nuestra financiación vamos al banco a buscar una re-financiación.

Desgraciadamente esto no suele ser la solución sino únicamente un aplazamiento del problema.

Primero hay que tener en cuenta que el banco buscará, evidentemente, proteger sus intereses. (¿Ha encontrado nunca un banco ONG?). Esto quiere decir que nos pedirá más garantías y además, visto que somos malos pagadores, nos cobrará más caro (subirá los tipos). Pero no nos solucionará nuestro problema de generación de tesorería.

Si nuestro negocio no está generando suficiente efectivo el problema es estructural, no coyuntural, así que hay que buscar soluciones estructurales.

Resulta una mejor solución re-estructurar nuestras cuentas para que sean capaces de generar el efectivo necesario o sino buscar una vía de financiación alternativa (¿Nuevas aportaciones? ¿Nuevos socios?) Que nos permita garantizar liquidez suficiente para atender los pagos ya contratados.

Son soluciones estructurales, por ejemplo, el redimensionamiento de nuestros stocks, una política crediticia más cuidadosa hacia nuestros clientes (personalización y seguimiento de los plazos ofrecidos)…

Y en estas soluciones quien mejor nos puede ayudar es, sin duda, algún profesional de la gestión económica y financiera empresarial, no un comercial de una oficina bancaria.

Evidentemente esto tiene un coste, y habitualmente un futuro mejor.

La refinanciación bancaria, también tiene un coste que, habitualmente, es superior.

El profesional contratado cobra por su trabajo, pero busca una solución duradera y que garantice la continuidad de la compañía. El banco busca una solución para su propio problema, es decir, no perder el dinero que ya ha dejado a la compañía, recuperar (y / o garantizar) todo lo que pueda y además aprovechar para subir los precios amparándose (con razón) en el mayor riesgo de la operación.

Saludos

Raimon

Última revisión: 14 de mayo de 2014

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